El hecho ocurrió en Curitiba donde ocurren 34,08 homicidios por cada 100 mil habitantes.
Es un destino muy apreciado por los viajeros, pero altamente peligroso, repleto de parques y jardines, como el Jardín Botánico de Curitiba o el Parque Tanguá.
Pero la criminalidad ha aumentado considerablemente este hecho ocurrió por disculpa de puntos de drogas en esta capital brasileña.